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Reconocimiento laboral: 3 buenas prácticas

El reconocimiento laboral es uno de los mejores incentivos para el buen desempeño de los trabajadores. 

En esta nota hablamos de 3 buenas prácticas para desarrollar una estrategia basada en la valoración de los empleados.

¿Por qué es importante el reconocimiento laboral?

El reconocimiento laboral se ha convertido en uno de los incentivos más valorados por los colaboradores de una empresa. 

Se trata de una estrategia utilizada para expresar aprecio, reforzando el comportamiento que desea la empresa e impulsando la motivación entre los empleados. Su objetivo primordial es alentarlos para mejorar el desempeño en las distintas áreas de la empresa.

La política de reconocimiento laboral que lleve adelante una empresa es seriamente evaluada por los candidatos a la hora de decidir si sumarse o no a una empresa.

En este sentido, algunos estudios demuestran que más del 30% de los trabajadores eligen buscar otra oportunidad laboral cuando no obtienen agradecimiento o reconocimiento en sus tareas. 

Por lo tanto, esta práctica puede brindar importantes beneficios para las organizaciones: desde mejorar el compromiso de los colaboradores hasta reducir la rotación de personal, potenciar la productividad y alcanzar los objetivos comerciales.

En concreto, se destacan las siguientes ventajas: 

  • Fomenta la colaboración en los equipos.
  • Potencia la productividad individual.
  • Genera lealtad.
  • Aumenta el compromiso.

Las empresas han entendido el poder del reconocimiento a los empleados y cuentan con estrategias destinadas a fomentarlo para que se sientan incentivados y valorados y, de esta manera, maximicen su desempeño. 

Buenas prácticas de reconocimiento laboral

Las organizaciones pueden desarrollar buenas prácticas de reconocimiento laboral, que motiven el desempeño de sus colaboradores y, de esta forma, alcanzar los beneficios mencionados anteriormente.

Algunas de ellas son las siguientes:

  1. Tratar a los empleados de la misma manera que se trata a los clientes. Si se generan incentivos y acciones específicas de fidelización, como solemos hacer con los clientes, haremos que los colaboradores se sientan bienvenidos y valorados permanentemente. En este punto los beneficios juegan un papel preponderante siempre que estén alineados a las expectativas de los colaboradores. 

  2. Establecer experiencias laborales personalizadas. Los colaboradores más jóvenes quieren ser escuchados, comprendidos y valorados. En este sentido, las empresas saben bien que la Employee Experience es el motor del negocio, pero deben ir más allá: brindar experiencias memorables para los trabajadores mediante premios y reconocimientos que se ajustan a sus demandas, necesidades e intereses.

  3. Reconocimientos organizados y planificados. Muchas organizaciones están haciendo uso de la gamificación como metodología para establecer reglas, metas y recompensas por objetivos. Sin dudas, esta práctica incentiva y mejora el rendimiento laboral de las personas.

En Bayton unimos con pasión a personas y organizaciones en el mundo del trabajo. Nos focalizamos en cada interacción para generar valor entre colaboradores y empresas para que ambas partes alcancen sus objetivos. ¡Conocenos!

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