El objetivo del distanciamiento social, preventivo y obligatorio es recuperar cierto grado de normalidad en cuanto al funcionamiento de la economía y la sociedad, siempre atentos a las normativas nacionales y provinciales que monitorean la situación sanitaria imperante. En este sentido, volver al trabajo de manera presencial debe tomarse con mucha cautela, priorizando el cuidado de la salud y preparando los espacios de trabajo.
Si bien desde hace un tiempo se promueve un replanteo de la fuerza laboral, hoy en día deben trazarse nuevas directrices en cuanto al ambiente laboral y ejercer un liderazgo sólido para atender el bienestar de los empleados y la comunidad. Los empleadores hacen frente a un panorama complejo debido a la crisis sanitaria, por eso aquí planteamos las preguntas más relevantes para abordar el regreso al trabajo en oficinas y otro espacios compartidos.
1. ¿Cuándo es el momento adecuado para volver al trabajo?
La protección de los empleados en el lugar de trabajo es uno de los pilares para dar respuesta a la crisis emergente en el mundo del trabajo. El trabajo remoto fue una opción válida para contrarrestar el impacto. Los empleadores ahora buscan las formas de traer de vuelta a muchos de sus empleados remotos.
El regreso a las actividades económicas debe ser progresivo y escalonado, como recomienda la Organización Mundial de la Salud. Por ejemplo, los puestos de trabajo no esenciales pueden esperar un poco más, hasta que la transmisión comunitaria disminuya en forma sostenida. Los empleadores deben permitir la continuidad del teletrabajo, promover un escalonamiento de las horas de trabajo y descanso y permitir innovaciones en la secuencia de tareas que favorezcan el distanciamiento social. En el contexto de trabajo en oficinas, es necesario examinar la distribución de los sectores y dejar espacio suficiente.
2. ¿Quiénes deben regresar al lugar de trabajo?
Las empresas deben dar prioridad a los puestos de trabajo que requieren de la presencia física, ya sea por la producción o la demanda. Es importante que los colaboradores que regresan a trabajar se sientan seguros y apoyados por sus empleadores. Aquí es fundamental la comunicación en el trabajo.
Entre las medidas para volver al trabajo, la prevención de aglomeraciones en las entradas y salidas y una buena gestión para adoptar horarios flexibles ayudan a evitar las multitudes en los horarios pico o la afluencia en los medios de transporte.
Del mismo modo, conservar un grupo de empleados que continúe trabajando de forma remota también favorece a la incorporación gradual que permita adaptarse a los distanciamientos físicos en la oficina o modificar sectores con separadores acrílicos si aún no se hizo.
3. ¿Cómo podemos proteger a los empleados que regresan a trabajar?
Seguramente las empresas ya implementaron medidas de higiene y trazaron un plan para volver al trabajo. El Ministerio de Salud recomienda colocar cartelería con información sobre la enfermedad y los cuidados de higiene en el trabajo, desinfectar las superficies de contacto y objetos de uso común, mantener los ambientes ventilados, y los empleados no deben compartir el equipo de oficina, como teclados o auriculares telefónicos.
Como primera medida de refuerzo es importante cuidar a las personas mayores de 60 años, embarazadas o quienes estén dentro de grupos de riesgo. En función de las características personales, las medidas sanitarias recomiendan disponer la licencia para estos trabajadores y adecuar el funcionamiento de la empresa.
Luego la OIT (Organización Internacional del Trabajo) recomienda algunas acciones para el cuidado de la salud de los empleados:
- Reforzar la seguridad y salud en los espacios de trabajo mediante normas de distanciamiento social, higiene de las manos, higiene respiratoria, entre otros.
- Promover modalidades flexibles como trabajo remoto, jornada parcial, flexibilidad de horarios.
- Expandir licencias y políticas flexibles para aquellos empleados que deban quedarse en casa para cuidar a adultos mayores o niños.
- Implementar un protocolo de control de fiebre sobre la base de las recomendaciones de la OMS y las autoridades sanitarias.
- Restringir la circulación de visitantes mientras el distanciamiento social sea obligatorio y promover las videoconferencias con clientes y proveedores.
- Cancelar viajes y reuniones no esenciales en espacios de trabajo reducidos. Las herramientas y plataformas digitales son las alternativas para las reuniones.
4. ¿Cómo debemos comunicarnos en torno al regreso al trabajo?
La comunicación interna es un valor estratégico importante. La pandemia es un evento disruptivo a nivel social. Al volver al trabajo, los empleados pueden tener preguntas y dudas sobre la organización. La empresa debe entablar comunicaciones frecuentes, proporcionar información necesaria sobre las medidas de seguridad e higiene, asegurarse de que los empleados puedan solicitar apoyo, fomentar la cultura del liderazgo, entre otros.
También es importante fortalecer los canales de comunicación, como el correo electrónico, las redes sociales o la intranet de la empresa.
5. ¿Cuándo se pueden retomar los viajes de negocios?
Es uno de los segmentos con más reticencias sobre su recuperación. En algunos países comienza a observarse una reactivación, pero es poco probable que los viajes de negocios internacionales se recuperen hasta que la pandemia haya retrocedido.
Por el momento, en Argentina los vuelos están restringidos. En el corto plazo comenzarán a operar los vuelos de cabotaje, pero aun así, los viajeros de negocios deberán pasar por una cuarentena de 14 días al llegar al destino y de nuevo al regresar a casa. Las empresas internacionales seguirán utilizando las videoconferencias durante muchos meses hasta que los viajes puedan reanudarse, aunque es probable que los viajes de negocios y las convenciones no asomen por mucho tiempo en el futuro del trabajo.
6. ¿Qué hacer ante un caso confirmado de COVID-19 en el lugar de trabajo?
Si se sospecha o confirma un caso de coronavirus en el entorno de trabajo, se considera el protocolo de contacto estrecho de casos confirmados. Es necesario identificar a cualquier empleado que haya estado en contacto con la persona infectada durante las 48 horas previas al comienzo de los síntomas, y esos empleados también deben abandonar los espacios de trabajo, ponerse en aislamiento domiciliario y vigilar los síntomas por 14 días.
Las áreas utilizadas por la persona enferma durante períodos prolongados en la última semana se deben acordonar y desinfectar según las medidas sanitarias.
7. ¿Cómo responder ante las crecientes necesidades de salud mental de los empleados?
La pandemia y el aislamiento social son eventos muy estresantes para algunas personas. El temor se hace palpable frente a algo desconocido para todos. En el regreso al trabajo, las necesidades de salud mental y emocional pueden continuar generando preocupación en la persona que las sufre y todo su entorno familiar y laboral.
Para los empleadores, este factor es un desafío importante. En el ambiente laboral, el liderazgo de servicio es la herramienta para ayudar a los empleados. En tiempos tan críticos, un buen líder puede hacer uso de sus habilidades de escucha y empatía. Un empleado angustiado debe percibir que sus jefes lo comprenden y ponen a su disposición recursos e información. El vínculo con los trabajadores y volver al trabajo predisponen a un diálogo abierto, en que el líder puede dotar de significado las dificultades que afrontan las personas frente a la pandemia, como algún trastorno familiar o la pérdida de un ser querido.
Las medidas preventivas son necesarias para reactivar la economía y esta guía para empleadores es útil para reanudar las actividades y cuidar la salud de los empleados para volver al trabajo. En Bayton los expertos de recursos humanos te ayudan con el regreso al trabajo.